Es muy probable que anheles llegar a un cierto punto en tu vida en el que ya no quieres trabajar por necesidad, querrás hacerlo simplemente por placer.
Es muy probable que tengas pasiones, aficiones, hobbies e incluso sueños de querer hacer o aprender algo llegado el momento en que tengas más tiempo. La realidad es que somos nosotros mismos quiénes debemos crearnos ese espacio de tiempo para cultivar y desarrollar pasiones y pasatiempos. También, para hacer o aprender algo que nos entusiasma, quizás algo que hicimos en algún momento durante la infancia, adolescencia o durante nuestra carrera universitaria.
El tiempo se ha vuelto una variable crítica en nuestros días y es un recurso no renovable. En la medida que avanzamos en edad, lo valoramos más. Si le asignamos un precio, cada segundo éste aumenta.
Quiénes hoy gozan de ingresos garantizados, derivados de programas de ahorro, pensión, jubilación, entre otros, regularmente tienen más tiempo que antes cuando trabajaban por necesidad. Es en ese momento que ya no requieres trabajar por necesidad, que encuentras tiempo abundante para hacer aquellas cosas que te encanta hacer: ejercicio, cocinar, leer, pintar, y mucho más.
Posiblemente desees experimentar nuevas actividades: viajar, tomar clases de fotografía, idiomas, repostería, entre otras. Por otro lado, si quieres tomarte el tiempo con tu pareja, con tus amigos, llegado el momento con tus hijos y nietos. Tal vez otras cosas más extremas, si la energía y fuerza lo permiten, como andar en moto, hacer el Camino de Santiago, recorrer en jeep la Baja California, tocar la batería…
Ahora bien, envuelt@ en tus años dorados, querrás levantarte a una cierta hora y aprovechar la mañana para activarte haciendo algo de ejercicio, meditar, desayunar de forma balanceada y saludable. Podrías compartir la mesa y el café o té con tu pareja o tu gente querida, pasear al aire libre por las tardes o trabajar en algún proyecto productivo. Tal vez viajar a través de la lectura, ir al cine o disfrutar de alguna película en casa, disfrutar a tus amigos y/o vecinos, etc.
Es justo esto anterior a lo que llamo el GRAN sueño, el de los Años Dorados, el de tu retiro del trabajo por necesidad y en cambió a partir de ese momento lo harás únicamente por placer.
Te estarás preguntando ahora… ¿y de qué forma podría garantizar mis Años Dorados? Te explico enseguida:
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